La obra de arte es como las cosas __ Proyecto - ¿Cuál es el lugar de las cosas?

/ l'oeuvre d'art est comme les choses _______ _____Projet - : Quel est le lieu des choses ?/

En el Museo de Arte Contemporaneo de Bogotá instalé un periscopio artesanal desde el cual podia leerse una valla pública ubicada a 1km del museo (en la Calle 80 con Avd. Boyacá) en la que excribí la frase ¿Cuál es el lugar de la cosas?
/Au moyen d'un périscope placé dans le Musée d'Art Contemporain de Bogotá on pouvait lire l'avis public placé à 500 mètres du musée /

Desde la calle 80Desde el Museo de Arte ContemporaneoPor el periscopio


Museo de Arte Contemporaneo de Bogotá
Septiembre de 2008
/Musée d'Art Contemporain de Bogotá
Septembre 2008/


"La obra de arte es como las cosas en tanto que perceptible por los sentidos y en tanto que materia formada (Heidegger, 1958)
pero lo otro de la cosa-arte es lo artístico."

El lugar de una cosa puede ser cualquier lugar, mientras la cosa sea cualquier cosa. Una cosa como una ‘herramienta martillo’ tiene como lugar la ‘caja de herramientas’, siempre y cuando el uso que se le dé sea el de herramienta. Este lugar -‘caja de herramientas’- resalta la pragmaticidad del martillo-herramienta, a la vez que él, -el martillo-, resalta a la caja como el lugar del martillo. En principio, parece que el uso (herramienta) define esta relación lugar-cosa en tanto que la cosa es útil. La correspondencia de la caja y el martillo se hace práctica, normal, no interviene discursivamente en nuestra vida cotidiana: martillo es a caja como caja es a martillo, sin más, así es.
Fuera de una cuestión de elegancia o gusto, el lugar de una o de las cosas está rígidamente adherido al pensamiento, quiero decir, al no-pensamiento. ¿Qué hace que esta situación sea axiomática? La caja de herramientas es el lugar del martillo, el cuarto de herramientas es el lugar de la caja, la casa es el lugar del cuarto de herramientas, etc. Hay un orden de sucesión y correspondencia entre los lugares y las cosas, orden que, en el caso de un hogar familiar se ha determinado por razones tanto de costumbres como de practicidad y limpieza. Sin embargo, la correspondencia entre los lugares y las cosas no es solamente útil y beneficiosa para la vida práctica, sino que también en ocasiones oculta hábitos que puestos en cuestión podrían resultar absurdos y develar estructuras arbitrarias potencialmente alterables.

Sandra López